domingo, 24 de julio de 2016
Oniria
He soñado mucho esta noche. He soñado con una amiga que se fué hace algún tiempo. Nunca me dio una explicación, y yo nunca supe si había hecho algo malo. En su día, pensé que no se puede obligar a la gente a que te quiera, y se marchó. Pues he soñado que volvía, que me explicaba porque se fue y me pedía perdón. Yo, estaba tan contenta por verla, que después de tanto tiempo me parecía una chorrada, y la perdonaba. Y se sentaba en mi mesa y cenábamos juntas. Me sentía tan feliz de verla.
Y luego he soñado contigo, que llorabas. Me ha dado tanta pena. Estábamos como en una casa oscura y no parabas de dar vueltas buscando la salida. Yo, te guiaba, pero antes de irte, te agarré del brazo, y te dije que no se puede estar huyendo siempre. Me miraste, paraste los pasos, y te pusiste a llorar. Mi alma se estremecía entera, no podía hacer nada con todo ese dolor. Me dijistes que no sabías si podías darme amor y llorabas. Te dejé marchar, y te fuiste con tu pesadumbre. Realmente te siento, no sé cómo, ni por qué, pero te siento. Y hoy tengo pena yo también, por verlo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario