Hoy quiero recordar
aquellos maravillosos años.
Viernes,
acababa de estudiar,
tejanos y camiseta,
algo de dinero,
y a correr que me esperan.
Sin nada en los bolsillos,
ganas de vivir de pulsera,
arena en los zapatos,
y papel en la chaqueta.
Y a mí,
me gustaba así,
hablando,
discutiendo
y enfrentando,
Cuántas diferencias mentales!
Después de la primera ronda...
todo se acababa mezclando.
Vivía feliz,
liándola en la mesa,
golpes de puño y risas,
muchas veces,
ni pisábamos las discotecas.
Directos a la playa,
enfrascados en la tertúlia,
o en cualquier parque,
en el refugio de una casita,
hasta que el sol salía,
y callaba esta desfachatez.
Y entre todos,
estabas tú,
y tú también,
Me guardo el recuerdo,
en la cajita vacía,
de mi niñez.
Cuándo dejamos de ser niños,
y nos convertimos en adultos.
Son los padres los que nos destierran del nunca jamás?
o lo son nuestros hijos.

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